Arturo J. Aballí, Jr., es un reconocido abogado multilingüe, experto en derecho tributario internacional, en fideicomisos y en planificación patrimonial y sucesoria. Ofrece su asesoría a muchas de las familias más adineradas del mundo. Cuenta con más de 40 años de experiencia en gestión de fortunas globales y transacciones internacionales. Pertenece a un pequeño grupo de abogados de fama internacional que ostentan el certificado en Derecho Internacional que otorga el Colegio de Abogados de Florida. Hizo sus estudios en Nueva York y en España y ejerció la profesión en Nueva York durante muchos años antes de trasladarse a Florida y fundar AMK en Miami, en 1993. Es miembro del Colegio de Abogados del Tribunal de Comercio Internacional de los Estados Unidos de América, autor de numerosos artículos y frecuente conferencista sobre una serie de temas de gran actualidad sobre tributación internacional, y está calificado por Martindale-Hubbell – la principal organización de rating profesional de los Estados Unidos de América – como “AV”, lo que denota el más alto nivel posible en cuanto a capacidad y ética profesionales.
El Sr. Aballí nació en La Habana, Cuba, en una familia de médicos de renombre. Su padre y su abuelo fueron médicos pediatras de fama internacional y a la vanguardia de la medicina académica. Muchos hospitales, incluyendo la Facultad de Medicina de la Universidad de La Habana, llevan el nombre de su abuelo.
El Sr. Aballí llegó a los Estados Unidos de América de adolescente, como consecuencia de la crisis que se vivía en Cuba a causa de la Revolución. A pesar de que su idioma materno es el castellano, adquirió rápidamente fluidez y conocimiento del inglés y se graduó en la Duke University con licenciatura en Humanidades, en 1965.
Rompiendo la tradición familiar, el Sr. Aballí optó por una carrera en leyes en vez de medicina, y recibió el Título de Doctor en Jurisprudencia por la Facultad de Derecho de la Universidad de Nueva York en 1968. Allí ganó la prestigiosa Beca de la Fundación Ford de esa misma Universidad, en el Programa de Derecho Civil, y por consiguiente tuvo la oportunidad de estudiar derecho civil en la facultad de derecho de la Universidad Complutense de Madrid, en España. Estando allí obtuvo experiencia en Derecho comparado y Derecho español, hacienda prácticas en el Bufete Vega Penichet.
A fines de 1969 el Sr. Aballí volvió a Nueva York donde fue admitido en el Colegio de Abogados de la ciudad y se unió a la firma Shearman & Sterling – largamente considerada como parte de un pequeño grupo elitista de bufetes americanos de lujo. Como asociado de la firma, y pasando por los varios departamentos de la misma, acumuló gran experiencia en aspectos de derecho comercial y tributario de sociedades entre las que estaban las más grandes multinacionales de los Estados Unidos de América. Después de dejar Shearman & Sterling se dedicó a representar a inversionistas extranjeros y empresarios estadounidenses que tenían intereses financieros en el extranjero, con especialización en derecho tributario internacional, y – siempre en Nueva York – colaboró en la fundación de un bufete de abogados especializados en derecho internacional que en 1982 se fusionó con Gadsby & Hannah, un estudio mucho más grande con sede en Boston.
A mediados de los 80 el epicentro de la inversión latinoamericana en los Estados Unidos estaba cada vez más concentrado en Miami, y Florida empezaba a experimentar una explosión demográfica (hoy es el tercer estado más poblado de los Estados Unidos de América, habiendo sobrepasado a Nueva York y solo superado por California y Texas). Miami era una ciudad cada vez más atractiva para cualquier abogado estadounidense que se ocupara principalmente de representaciones legales internacionales y, sobre todo, de atender los intereses de gestión patrimonial de una clientela latinoamericana. Al darse cuenta de la creciente demanda de esos servicios, y de la oportunidad de ofrecerlos, el Sr. Aballí y su esposa peruana, Patsy, se mudaron a Miami donde, en 1987, él ingresó en el estudio internacional de abogados Squire, Sanders & Dempsey (hoy Squire Patton Boggs), en calidad de socio en la Oficina de Miami donde ayudó a ampliar la clientela latinoamericana de ese estudio.
Luego de otros seis años trabajando en el estudio antes mencionado, el Sr. Aballí decidió volver al ejercicio del derecho más especializado. En 1993, junto con sus colegas de Squire, Henk Milne y Craig Kalil, creó AMK, un estudio internacional de abogados especializados en derecho tributario internacional, fideicomisos, planificación sucesoria y resolución de conflictos internacionales. A lo largo de los últimos 26 años en AMK, el Sr. Aballí ha sido el elemento central de un grupo muy bien cohesionado de abogados multilingües y multiculturales que comparten los mismos principios y que han desarrollado relaciones laborales muy fuertes con una red de especialistas en las mismas materias, que ejercen en todo el mundo.
A lo largo de su carrera de abogado – que hasta la fecha cubre más de 40 años – el Sr. Aballí ha ganado enorme experiencia en todos los aspectos relacionados con la gestión de bienes internacionales. Tiene clientes de todo el mundo que buscan su asesoría legal, aunquesu especialización es y ha sido representar a clientes extranjeros domiciliados en los Estados Unidos de América, en la gestión de negocios, transacciones e inversiones internacionales. En términos de especialización, el Sr. Aballí se concentra en tributación internacional, fideicomisos, sociedades y planificación patrimonial y sucesoria para familias e individuos de alto valor patrimonial, transacciones financieras internacionales; adquisiciones corporativas transfronterizas; y contratos de licencias internacionales. En esta última categoría, y con el impulso que hoy está teniendo la industria del entretenimiento en Miami, el Sr. Aballí está cada vez más involucrado en la representación legal de estaciones de TV latinoamericanas, productores independientes de TV y autores.
El Sr. Aballí es un invitado frecuente en seminarios internacionales como ponente sobre temas de gran actualidad, incluyendo planificación tributaria, contratos internacionales, tratados de intercambio de información, y estructuras de protección de bienes capitales. Ha sido Director de las Cámaras de Comercio de Colombia y España, y en la Junta Asesora de la Banca Internacional de Florida. Es miembro de los Comités de “Actividades en Estados Unidos de Extranjeros”, “Derecho Tributario” y “Derecho Internacional” de la Asociación Americana de Abogados, la Sección de Derecho Internacional, de Derecho Tributario y el Comité de Tributación en el Extranjero del Colegio de Abogados de Florida; es miembro de la Asociación de Abogados Cubano-Americanos, del Consejo de Planificación Sucesoria de Miami, y de la Sociedad de Abogados de Planificación Sucesoria y Fideicomisos (STEP) con base en Londres (Sección de Miami).
El Sr. Aballí habla castellano, inglés, portugués y francés con fluidez. En 1999 estuvo entre los primeros abogados de Florida que recibieron el Certificado del Colegio de Abogados de ese Estado, en calidad de Especialista en Derecho Internacional. Ha obtenido el más alto nivel de calificación en el Registro Martindale-Hubbell – “AV Preeminente” – como reconocimiento de su capacidad y ética profesionales.
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